De la realidad bonita del aula en la universidad a la verdadera realidad de un colegio, la cosa cambia.
Con esto me refiero al docente, a lo que hace, a lo que no hace o a lo que hace para poder cambiar, para estar más fresco el y sus alumnos, para no caer en la rutina, para no odiar a algún niño, ! es niño por favor!
No hay cooperación por lo general, unir las piezas de un puzzle totalmente obsoleto ¿puede tener algún sentido?
Cada uno de los pensamientos que tengo a diario sobre mi docencia no será nunca seguir una rutina, siempre habrá cosas diferentes que les hagan sentir personas y simplemente con sus sonrisas ese puzzle tenga toda su vida.
sábado, 25 de abril de 2009
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